viernes, 2 de enero de 2009

EL AJO (ALLIUM SATIVUM L)



TEÓFRASTOS. Filósfo griego (nacido en 372 a.C) cuenta que el Ajo era colocado por los antiguos griegos sobre pilares de piedras en los cruces de los caminos, como una fiesta para Dioses.

VIRGILIO. Poeta romano (70 a-C), en sus Eglogas afirma que el Ajo era muy consumido por los antiguos griegos y romanos.

PLINIO EL VIEJO. Naturista romano y autor, afirma que el Ajo era invocado como deidad, al tomar los juramentos, por los antiguos egipcios, pero esta planta ya era conocida y preciada antes de eso.

HOMERO. Poeta épico de la antigua grecia (1000 a.C.) dice que el Ajo formaba parte del convite servido por Néstor a su huésped Macaón. Dice también que debido a las virtudes del Ajo, Ulises debió su escapada de Circe, que quería convertirlo en un cerdo al igual que a sus compañeros.

GALENO. Habla con gran estimación de esta planta, elogiándola como el "Theriac" rústico "cura todo".

La introducción del Ajo a América Latina se da con la conquista española, siendo el Ajo remedio indispensable tanto en el boriquín médico popular como en el del médico hipocrático Español del siglo XVI.

El cultivo y comercialización del Ajo se extiende rapidamente en nuestro continente y hasta hoy en día se comercializa en mercados y por vendedores ambulantes en forma de ristras y pesado por libras.

Es utilizado en la preparación de salsas y en la elaboración de salsas de "Pasta de Ajo" las cuales son vendidas en supermercados, tiendas y expendios populares.
Popularmente el Ajo es considerado como una planta mágico que atrae la buena suerte que libra a los negocios de influencias negativas y malos espíritus.
Es muy común ver al Ajo acompañado de la Sábila colgando detrás de las puertas de bares, comedores, tiendas, etc. Es considerado como una planta medicinal en el tratamiento de las mas variadas enfermedades.
Estimula las mucosas gastrointestinales provocando un aumento de las secreciones digestivas y de la bilis.
Es diurético.
Aumenta las secreciones bronquiales, por lo que se dice que es expectorante, desinfectante y descongestionante.
Su consumo frecuente provoca vasodilatación (aumento del diámetro de pequeños vasos sanguíneos; arteriolas y capilares) lo que hace que la sangre fluya con mayor facilidad y que disminuya la presión sanguínea.
Por todo ello, el consumo habitual de ajo es muy recomendable en caso de parasitosis intestinales, cualquier proceso infeccioso y para aquellas personas que tienen hipertensión y riesgo cardiovascula.

PROPIEDADES FARMACOLOGICAS
Antimicótica, antibacteriana, antiviral, emulgente, hipotensora, vermífuga, hipoglucemiante, diurético, antitumoral, repelente.

El Ajo es una hortaliza muy utilizada en la preparación de comidas.
Es una especie medicinal frecuentemente utilizada en el tratamiento de: Diarrea, (para asentar lombrices alaborotadas), dolor de estómago, reumatismo, artritis, dolor de oídos, hongos en la piel y para calmar los nervios. También es utilizado para enfermedades del corazón, presión alta, dolores musculares y para adelgazar.

ACTIVIDAD ANTIMICÓTICA:
El extracto de Ajo inhibe el crecimiento de Histoplasma capsulatum especies de Epidermophyton y Microsporum, C. albicans, Cryptococusneoformans y trichosporum. Comparado con griseofulvina y Anfotericina, el Ajo es fungicida de amplio eslpectro.
La alicina presenta actividad sobre los hongos de las especies de Cándida, Cryptococus, Trichophyton, Epidemophyton y Morosporum.

El ajo crudo tiene propiedades antisépticas, fungicidas, bactericidas y depurativas, debido a que contiene un aceite esencial volátil llamado aliína, que se transforma en alicina, responsable de su fuerte olor y que se elimina por vía respiratoria. Aunque también tiene otras propiedades beneficiosas para el organismo:

Se ha observado, sus efectos en ACTIVIDAD ANTIVIRAL.

ACTIVIDAD VERMIFUGA:
El extracto alcohólico presenta una actividad moderada sobre ascaris lumbricoides.

Ensayos clínicos sugieren que el bulbo de Ajo fresco macerado o el aceite esencial o el extracto acuoso puede prevenir la hiperlipidemia alimentaria y cambios en la coagulación de la sangre.
También se ha reportado que el Ajo puede bajar el nivel de colesterol del suero de los humanos normales. En una investigación reciente con 20 pacientes hipercolesterómicos, se redujeron las concentraciones de lípidos en mayor grado con dieta normal y Ajo, que con dieta hipocalórica solamente.
Sin embargo, la administraación del Ajo desecado en dos ensayos clínicos con pacientes hiperlipoproteinemicos no produjo efectos significativos en la concentración de lípidos en la sangre. Y el análisis de la relación del consumo de Ajo y la Cebolla y la mortalidad de la enfermedad cadíaca isquémica no evidenció el efecto referido al Ajo.

En 5 casos consecutivos de hipertensión el ajo redujo la presión de la sangre hasta niveles satisfactorios.

Se ha reportado que la aplicación de rebandas finas del bulbo Ajo, se ha reportado para ayudar a curar las perforaciones de la membrana timpánica, en 17 de 18 personas en un hospital chino.

Se ha reportado que el Ajo tiene propiedades diuréticos con efectos antitumor.
El extracto de Ajo presenta actividad larvicida contra el mosquito. El principio larvicida es identificado como alicina. Se ha reportado el Ajo como un repelente efectivo de mosquitos y mosca negra.

El ajo produce mal aliento y transpiración desagradable, sólo por un corto período de tiempo, es decir mientras se expulsan las toxinas acumuladas en el organismo, una vez liberadas éstas, ya no se despide mal olor, ni en el aliento, ni en la transpiración, ni siquiera en la orina y las deposiciones. Esto es debido a que ese olor desagradable que se atribuyen a los ajos, no es debido a los ajos propiamente dicho, sino a las toxinas acumuladas en el organismo que, al combinarse con los activos principios eliminadores del ajo, despiden ese olor desagradable.

Esto se puede entender fácilmente con este ejemplo. Una persona que practica una alimentación sana y natural, donde el ajo ocupa un lugar preferencial, no desprende ese olor tan desagradable que se le atribuye al ajo, pero sí ocurre esto, en aquellas personas que comen ajo, pero a su vez continúan una mala alimentación, en base a alimentos ricos en grasas, embutidos, bebidas alcohólicas, etc. En estos casos lo que sucede, es que el ajo continua constantemente, eliminando toxinas, producidas por la mala alimentación, y es justamente, la constante eliminación de estas sustancias, la que producen ese olor desagradable, no el ajo.

Y para finalizar, diremos, que el órgano que más se beneficia con el ajo crudo, es el corazón. Si tenemos en cuenta, que el ajo, es el gran purificador de la sangre, sacaremos como consecuencia que también es el gran fortalecedor del corazón.

El tratamiento de ajo

Consiste en tomarlo en ayunas, a mediodia y por la noche, bien con leche, con pan, molido, cocido y aún en todas las formas con tal de saturarse bien. A veces, en casos dificiles, convendria ayunar unos dias y no comer más que ajos. La curación generalmente es segura.

Con ajos se expulsan lombrices solitarias y se evita el tifus.

La alta presión arterial, para el reumatismo crónico, males del estómago, enfermedades de los nervios, agotamiento, pérdida de vitalidad, etc.



..

ac
El ajo es reachazado por su fuerte olor, pero aceptado por sus beneficios medicinales.

El ajo es un alimento universalmente conocido, pero también una planta con potentes e importantes efectos medicinales. Uno de los componentes más activos del ajo fresco, es un aminoácido denominado alicina y la enzima alinasa. Cuando un diente de ajo se mastica, tritura, corta o prensa, estos compuestos se mezclan para formar la alicina, responsable de su fuerte olor. A su vez, la alicina se convierte en otros compuestos de azufre en pocas horas, los cuales tienen diversas propiedades curativas.
El ajo tamibién contiene una amplia gama de elementos, entre los que se encuentran el cobre, hierro, zinc, magnesio, germanio y selenio. Sus características dependen de la riqueza del suelo en el que crece.

EL AJO Y LAS INFECCIONES.
El consumo del ajo es bueno para ayudar al sisrtema inmunitario del organismo a resistir las infecciones. Aunque el ajo no es tan potente como los modernos antibióticos, es capaz de eliminar algunas cepas de bacterias que se han vuelto resistentes. Hay estudios que demuestran que el ajo es más potente que muchos tratamientos mèdicos estandar para las infecciones por levaduras, y que pueden eliminar el virus responsables de los resfriados; además de ser útil en infecciones como la úlcera gástrica, la colitis y el sarcoma de kaposi debido a sus propiedades anti microbianas.

PRECAUCIONES
Se pueden encontrar diversas preparaciones de ajo en el mercado, por lo que es importante analizar la información que aportan los fabricantes, asi como hablar con el médico y encontrar la preparación más eficaz para cada situación, ya que su comsumo debe evitarse en personas alérgicas, asi mismo en las pesonas hemofílicas porque inhibe la coagulación de la sangre.

USO DEL AJO PARA DIVERSAS ENFERMEDADES

Enfermedades coronarias
Algunos estudios demuestran que el consumo regular de ajo, mejora los niveles de colesterol. Personas con colesterol elevado, han sido capaces de normalizar sus valores tomando de 1 a 2 dientes de ajo por día, disminuyendo las lipoproteínas de baja densidad (LDL) y los triglicéridos y aumentando las lipoproteínas de elevada densidad (HDL), que contribuyen a la prevención de la enfermedad coronaria y accidentes vasculares cerebrales.

Hipertensión
El ajo puede ayudar a disminuir la presión sanguínea mediante sus compuestos de azufre y su capacidad para reducir las sustancias grasas, como el colesterol. El empleo del ajo también normaliza la presión sanguínea baja.

Agregación plaquetaria
El ajo puede usarse de forma eficaz, de la misma manera que una dosis diaria de ácido acetilsalicílico, para reducir o prevenir la agregación plaquetaria durante un tiempo prolongado, ya que el azufre del ajo da a las plaquetas un caracter deslizante.

Cáncer
Estudios han demostrado que el ajo bloquea la formación de potentes carcinógenos, denominados nitrosaminas, que pueden producirse en la digestión de alimentos. Además, que demuestran que el uso del ajo puede inhibir el crecimiento de ciertos tumores.

Diabetes
El ajo tiene la propiedad de disminuir y mantener el azúcar sanguíneo estable, ayudando a aumeantar la cantidad de insulina disponible en el torrente circulatorio. Esta acción junto con su capacidad para disminuír el colesterol y la presión sanguínea, le hacen un suplemento diario importante para para las personas con diabetes.






1 comentario:

Anónimo dijo...

Quiero compartir con todos, mi experiencia personal; ya que hace algunos años sufrí un accidente automovilístico, que me ocasionó dos infartos en el corazón; razón por la cual me decidí a ingerir un diente de ajo al día, dividido en pequeñas porciones, y como resultado de este tratamiento natural, mi condición física se ha mantenido saludable y además no he tenido necesidad de ingerir ninguna clase de medicamentos tradicionales. Espero que este comentario sirva de luz para aquellas personas que como yo han sufrido de infarto y tienen el deseo de tener una vida perdurable.